No mires el pasado, porque te trae desilusiones, ignorancia, furia y desesperanza.
No mires el futuro, porque no sabes si será bueno o malo, si será beneficioso o frustración.
Más bien, mira el presente, porque así eres y así serás, ya que tú eres y lo serás para siempre, una persona con sueños e ilusiones, con alegría y felicidad.
Porque es tu destino.
Y porque tú serás el dueño de tu vida.